Desde MBP School of Coaches, entendemos el saque de meta como el inicio estático en la fase ofensiva. Por otro lado, en la fase defensiva, la presión del equipo en los saques de meta del adversario se denomina defensa del inicio del juego estático.

En el blog de esta semana, ahondaremos en los objetivos que puede tener un equipo durante esta acción del juego ofensivo. Estos dependerán del tipo de organización que adopte, pudiendo ser abierta o cerrada.

Objetivos del saque de meta: estructura abierta

En este apartado, analizaremos los objetivos relacionados con la estructura abierta del equipo. Es importante diferenciarlos según cómo el conjunto quiera iniciar con el balón y el nivel de riesgo que esté dispuesto a asumir en estas situaciones.

Salir jugando: Cuando el equipo prioriza el juego en corto, la mayoría de los pases se dirigen a jugadores situados en zona de intervención o intermedia (5-15 metros de distancia).

Atraer para jugar a segunda línea: En este caso, se busca empezar en corto, mediante pases a los centrales o jugadores cercanos, para que el rival avance y luego aprovechar los espacios libres a espaldas de medios u otros sectores.

Jugar en largo: En estas situaciones, el equipo intenta buscar a los futbolistas ubicados en profundidad. Esto se hace cuando se tiene una superioridad cualitativa en la delantera, es decir, ventaja en un 1vs1.

Objetivos del saque de meta: estructura cerrada

Cuando el equipo decide cerrarse a nivel organizacional y juntar a sus jugadores, probablemente es para minimizar riesgos en el inicio del juego. En la mayoría de las veces, el portero buscará un balón largo con el objetivo de ganar la primera y segunda jugada para empezar el juego a partir de estas acciones. Sin embargo, también existen otros objetivos que describimos a continuación.

Compactar los futbolistas: Esta es la situación más común. El equipo en ataque y defensa se junta para ganar la disputa y la segunda jugada. En estos casos, los atacantes deben tratar de evitar que el balón rechazado por los rivales vuelva a su zona.

Ganar amplitud: En algunas ocasiones, los conjuntos liberan a jugadores a lo ancho del campo, manteniendo el equipo compacto en la zona donde en teoría se va a mandar el balón. Sin embargo, suelen jugar directamente con el jugador posicionado en amplitud.

En resumen, el saque de meta en fase ofensiva ofrece diversas estrategias y objetivos que deben adaptarse a la estructura y filosofía del equipo, siempre con la intención de maximizar la posesión del balón y minimizar los riesgos de pérdida.

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