En la etapa de fútbol formativo, es habitual que los padres vayan a ver jugar a sus hijos. ¿Eres padre o madre y vas a ver a tus hijos jugar? ¿Cómo actúas en la grada? En este artículo queremos presentarte los 5 perfiles de padres que hay en las gradas de los campos de fútbol. ¿Con cuál te identificas?
Es frecuente que, durante el período de formación, antes y durante el partido los familiares motiven a los niños/as con mensajes de ánimo e incluso les den consejos sobre cómo actuar para conseguir la victoria. Eso es positivo siempre y cuando no presionen excesivamente a los jóvenes jugadores.
Una vez termina el partido es muy importante el enfoque que se le dé al resultado por parte de las familias, priorizando siempre los aprendizajes y el disfrute a través del juego en lugar de la victoria o la derrota.
Sin embargo, algunos familiares se convierten en entrenadores desde la grada. Critican al propio entrenador, a los jugadores y en algunos casos también a otros familiares. Sobre esto, Ogando (2019) hizo una clasificación de esos familiares según su comportamiento negativo dentro de un campo de fútbol, y obtuvo 5 tipos:
1. El “normal”
Busca que su hijo/a se divierta y se relacione con otros niños/as de su entorno para que adquiera seguridad en lo que hace. Esos padres y madres suelen ser poco amantes de los deportes y su prioridad es que su hijo/a sea feliz y lo consiga con el deporte, transmitiéndole palabras de ánimo sin rendirle cuentas de los resultados.
2. El “entrenador”
Trata de dirigir a su hijo/a -y a veces a los demás también- a gritos, dando instrucciones desde la grada contrarias a las del entrenador principal, lo cual provoca el desconcierto del niño. Se caracteriza por pasearse por la grada mientras su hijo juega, controla los minutos de juego, propone alineaciones y apunta resultados. Con su actitud presiona al niño.
3. El “hincha”
Es simplemente un apasionado/a que está con el equipo y en contra de todo lo que se oponga a este. Le pide a su hijo que juegue y se entregue al máximo en cada partido como si fuera lo más importante en la vida, pero olvida que su hijo no es un profesional y que el deporte tiene que transmitir unos valores por encima de competir a cualquier precio. Puede mostrar conductas antideportivas y de falta de respeto a otros aficionados, al árbitro o al equipo rival.
4. El “escondido”
Se acerca a su hijo/a y le da indicaciones disimuladamente sobre lo que tiene que hacer, a espaldas del entrenador/a. Es muy parecido al perfil “entrenador”, con la diferencia de que, en este caso, las indicaciones son únicamente para su hijo y a escondidas.
5. El “directivo”
Es un perfil que quiere imponer sus ideas y conspirar con o contra algo que ocurra en el equipo, normalmente influenciado en contra del entrenador/a o club. Esos familiares suelen criticar cualquier decisión del entrenador o responsable deportivo de la entidad, y para ello intentan convencer a otras familias para que se unan a su causa.
Después de ver los perfiles descritos anteriormente, ¿con cuál te sientes más identificado? ¿Has convivido con alguno de ellos? ¿Qué harías en caso de encontrarte con alguno?
Como entrenadores, padres, madres o simplemente aficionados del fútbol, debemos tener muy en cuenta esas conductas para evitar que sean algo habitual en los terrenos de juego. Para ello, es clave que desde los clubes o academias se fomenten formaciones a las familias para que colaboren en el proceso formativo de los jóvenes jugadores.
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